Me describo como solitario y fácil. Mi inocencia se ve reflejada al creer que todos los corazones son como yo.
Desde este lugar, donde me encuentro hoy, donde la felicidad no escaló ni siquiera un paso hacia arriba, puedo decir que busco aquellos corazones difíciles, casi inalcanzables. Son aquellos que se encuentran en lugares a donde me va a costar más llegar.
Ayer caí en una dulce tristeza comprendiendo que uno de los tantos corazones que intento alcanzar está más lejos de lo que yo creía. Hace tiempo se encontraba libre, el destino me llevo kilómetros afuera por un tiempo y al volver, ese corazón había sido alcanzado por otro que no era yo. Desde ese entonces me invadió una impotencia enorme. Semana a semana lo encontraba alejado de quien lo había alcanzado. Quizás cada mirada de él y cada sonrisa dirigida a los ojos que me hacen latir, me hacían creer que me encontraba a pasitos de él. Simplemente con esos momentos me daba felicidad y latía más y más fuerte.
Inocentemente fui engañado por mi mismo. Ayer conocí al corazón que está más cerca de él que yo. Los pude ver cerca y pude comprender que mi esperanza de dejar la soledad a un lado se estaba alejando.
Su corazón no me siente cerca y quizás nunca lo hizo.
Hoy aquí, vuelvo a ser yo: un corazón más solitario y más fácil que nunca.
Desde este lugar, donde me encuentro hoy, donde la felicidad no escaló ni siquiera un paso hacia arriba, puedo decir que busco aquellos corazones difíciles, casi inalcanzables. Son aquellos que se encuentran en lugares a donde me va a costar más llegar.
Ayer caí en una dulce tristeza comprendiendo que uno de los tantos corazones que intento alcanzar está más lejos de lo que yo creía. Hace tiempo se encontraba libre, el destino me llevo kilómetros afuera por un tiempo y al volver, ese corazón había sido alcanzado por otro que no era yo. Desde ese entonces me invadió una impotencia enorme. Semana a semana lo encontraba alejado de quien lo había alcanzado. Quizás cada mirada de él y cada sonrisa dirigida a los ojos que me hacen latir, me hacían creer que me encontraba a pasitos de él. Simplemente con esos momentos me daba felicidad y latía más y más fuerte.
Inocentemente fui engañado por mi mismo. Ayer conocí al corazón que está más cerca de él que yo. Los pude ver cerca y pude comprender que mi esperanza de dejar la soledad a un lado se estaba alejando.
Su corazón no me siente cerca y quizás nunca lo hizo.
Hoy aquí, vuelvo a ser yo: un corazón más solitario y más fácil que nunca.
4 comentarios:
No puedo creer que esto exista desde el 11 de Febrero y recién hoy me vengo a enterar...! Y ahora que estoy acá, me dejo llevar por tus palabras, me emociono, me identifico con muchas cosas que decís. Compruebo renglón a renglón que te conozco, instantáneamente me imagino qué se te pasó por la cabeza para escribir estas líneas. Ya tenés una lectora fiel, expectante por ver más creaciones. Así que, mujer, a seguir escribiendo! Beso enorme.
Gracias corazón! sabes que te adoro y si fuiste mi 1er lectora es porque realmente sentí que tenías que serlo! te quiero Gugui!
Hoy mi corazón está más solitario y triste que nunca, por eso te entiendo. Yo también me fui engañando de la misma manera. Ahora la esperanza se diluyó y me enfrento una vez más con la realidad que no quise y no quiero ver...
te quiero y seguiré leyéndote! No dejes de poner en lindas palabras lo que sentis.
besos
este texto surgió de un comentario que dejé en un lindo blog:
"Easy heart"
my best advice today:
It's letting go either way,
To the heart that falls free, always willing to see the shades of all the colors.
...signs:
an owner of a lonely and easy heart.
( Gracias S.V. por tan lindo blog!)
We feel alive just those little moments: when one heart reaches another.
It´s so beautiful.
Thanks. You make my heart happy for one little moment.
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